Todos hemos acordado que esta es economía de mercado, en que los privados son los que dan los empleos. Ahora, si no lo hacen, cómo hacemos, si al mismo tiempo el Gobierno está limitado en lo que pueda hacer en esa materia. Este es el tema de fondo. No hay ninguna sociedad democrática estable, con regímenes políticos legítimos, y con un sistema político que tenga legitimidad en la gente, si no tiene un componente de solidaridad importante, y un componente de equidad. Que se repartan bien los beneficios de crecimiento o de la recuperación económica.
Efectivamente tenemos un problema muy serio. Todavía las Pymes, y muchas de las medianas, no tienen acceso efectivo al crédito bancario ni al capital. Entonces, se da una paradoja. Que las tasas de interés bajas benefician a la empresa grande que quiere modernizarse, cambiar su tecnología y termina despidiendo gente, y la Pyme que podría recontratarla, no tiene acceso al crédito".
Por la incorporación de nuevas tecnologías,El problema es que eso, a mediano plazo, crea una dificultad enorme, porque esos mismos sectores que no están recontratando gente, le están diciendo al Gobierno: "Usted no me gasta un peso más de lo que se comprometió". Entonces ¿quién se hace cargo de los cesantes? Si el sector privado no recontrata -tenemos situaciones como la de Valparaíso, que tiene un desempleo de un 18 por ciento, la comuna de La Pintana, un 17 por ciento-, ¿quién se hace cargo de eso? Si al Gobierno lo amarran de manos con el superávit estructural, y los privados no hacen su tarea de acompañar el aumento de sus ventas y de su producción con un aumento de las contrataciones. Ese es un dilema de fondo, respecto del cual deberíamos tener una conversación entre los privados, la gente que está en el Gobierno y los que estamos en el Congreso, para hacer un gran acuerdo nacional pro empleo.
Me preocupa que las últimas cifras muestran que sectores que han estado creciendo fuerte en su producción, como son la industria, la construcción, el comercio y la agricultura, esos sectores han estado despidiendo gente y no contratando, a pesar de que la economía va para arriba.