-Leí tu blog para conocer qué hacen en sus sesiones de juegos de rol, me dijo una señora el fin de semana pasado, mientras tomaba un café en una cafetería céntrica. Ante su interrogante le respondí:
-Simplemente buscamos divertirnos. No quedó totalmente convencida.
El hecho que los jugadores de "Nemonikuz, el arte hermético de la memoria", nos encerremos para realizar nuestras reuniones tiene el mismo propósito que la reunión de cualquier grupo privado, guardar y preservar la intimidad o asuntos particulares lejos de aquellos que no forman parte de la asociación.
Pero, de inmediato surge la pregunta:
Si buscan entretenerse, ¿por qué no dan la posibilidad a todos?
La respuesta es simple.
El juego Nemonikuz, "el arte hermético de la memoria"; simula una institución iniciática, es decir que no basta la voluntad del interesado, sino debe sumarse el interés de los miembros en escoger a esa persona. ¿Cuál sería la escala para decir sí o no?
Para el logro de esta empresa se necesario que él o la interesada posea un nivel mínimo de educación que le permita la comprensión y desarrollo del pensamiento abstracto (hay que estudiar algunas cosas algo espesas) y lúdico (difrazarnos como personajes) a la vez. Esta cualidad es imprescindible pues toda la doctrina o metafísica del juego, se expresa por medio del estudio de un libro simbólico.
Cada nueva reunión produce un efecto en el interior del personaje que lo transforma, permitiéndole el crecimiento interior.